Leer entre líneas. Teorema: "O tú conmigo o yo sintigo"

Demasiado obvio como para demostrarlo, se toma como axioma.

Ya no tengo esa sensación, ya no me acuerdo. Paso de gymkanas.

Ahora es cuando yo vuelvo. Ya es hora.

Infinitos sacrificios hasta haber llegado a este punto. Pero sé que es el momento, sé que tengo la oportunidad y sé que debo aprovecharla.

Exageración, sí, pero ya cumplí condena y  viví el mejor momento para saber que es tiempo de sentirme libre y todo lo que ello acarrea. Ya no más debo, es tiempo de quiero. Ahora seré una chica pegada a unos botines y uno casos, no a un boli y un papel. Me da igual el calor que haga, pienso recorrer todo el camino que he dejado a medias. Vuelvo para todos pero sobre todo para mí. Estoy deseosa de construir futuros recuerdos, de vivir más que nunca. Mal, las buenas expectativas decepcionan, pero el no ya existe.

Desecho malas vibraciones, me rindo, he dejado de esperar a que reacciones, buena suerte.

Tiempo es lo que nos hace falta, asique ya no podemos quejarnos.

Espero que lo estés notando, son destellos de lo que viene. No te vayas, no dejes que me vaya.

Mi sombra no se va a descoser a no ser que yo quiera. Mi ventana va a estar abierta a no ser que yo la cierre. Yo creo, si creo. Yo vuelvo, si vuelvo.

Mirando al cielo

El ser humano es, por naturaleza, libre. Incluso eligiendo no serlo, lo es, ya que es libre de elegir no serlo.  

El día que sea como los demás quieren que sea seré capaz de madrugar con una sola alarma, despertaré con el pie derecho y peinada, vestiré clásica y discreta, me maquillaré y no usaré botines para andar por casa. Mis uñas estarán perfectamente pintadas, o perfectamente limpias de esmalte. Tendré la cama hecha, el cuarto recogido y todo limpio. Mi ordenador solo se encenderá para consultas estudiantiles y no tendré la música alta. Tendré una media de 11 sobre 10 y seré matemática, por mucha física que me guste. Estaré rodeada de "gente buena". No perderé el tiempo en tonterías, imagina a cuales me refiero. Seré perfectamente puntual, una media de 7 minutos antes de quedar. Recogeré la mesa, pondré la mesa y no ensuciaré la encimera al hacerme el desayuno. En mi casa no habrá peleas por el sitio, por los cojines, por el mando o por el baño. Llegaré puntual a casa.

Puede, permitiéndose la gran duda, que algún día sea así... Mientras tanto seré todo lo contrario.